jueves, 22 de julio de 2010

Adiós amigo verde


El querido ogro Shrek se despide con una angustia de mediana edad pero sin dejar de lado su tono festivo y aventurero que le guarda un sitial de respeto en la animación de la última década"

Hace casi una década Shrek del estudio Dreamworks, donde es accionista Steven Spielberg, asombró al mundo con una arriesgada y novedosa apuesta animada en la cual se mofa sin descaro de los cuentos infantiles tradicionales, ridiculizándolos al máximo con parodias y gags que hacen reír de buena gana a grandes y chicos. El otro hito de esta cinta de animación digital, es que fue en la primera en ganar el Oscar de la categoría animada y, ha sido una franquicia ahora en su cuarta cinta la que ha recaudado la no despreciable suma de millones de dólares en las salas y merchandising. Ahora Shrek en su cuarta entrega final y, después de casarse y tener hijos, se despide de la forma que lo vio nacer, con mucha festividad y gags pero no se puede dejar de lado el acento lleno de angustia de mediana edad que asoma en el ogro y con una entrega de muchos aprendizajes relacionados con respetar tu entorno familiar. Esta vez el ogro esta domesticado y comienza a tener serios problemas con lo cotidiano, como mudar a sus bebes, no poder dormir hasta tarde y arreglar el resumideros. Comienza a tener la sensación de perdida de sus libertades e incluso se convierte en una atracción turística para los habitantes de la ciudad como un ser que alguna vez fue temible. Ello comienza desgastarle, entonces decide abruptamente que necesita un espacio propio como antaño pero como nada resulta como se planea. Aparece en su camino el malvado Rumpelstiltskin que le ofrece un trato se ser el Shrek temible de antaño y libre solo canjeando un día de su infancia. Obviamente todo es un engaño y el ogro aparece en un mundo alternativo donde sus amigos no lo conocen, ni tiene a su familia y, deberá luchar por conseguirlos o perderlos para siempre. Burro acá es un animal de carga y el gato con botas es un obeso y domesticado felino.
La animación es sensacional a pesar de no haberla visto en 3 D, asimismo el tono humorístico que nunca falla en esta saga que permanece intacta en su afán de agradar a los padres acompañantes. Se nota el desgaste, que es evidente después de cuatro entregas, pero son tantas las aventuras, las peleas y los chistes que disimulan súper bien dichas falencias. Siguen las referencias a la cultura pop, parodias que de seguro fueron captadas por los realizadores que decidieron a buena hora guardar al viejo Shrek y dejarlo como un hito en la animación. Recomendable panorama familiar sobre todo ahora en las vacaciones de invierno donde el público ya promete asistir en masa a las salas que se visten de gala para recibir a los niños. Por David Lizana